A.J. Burnett (1-0) se alzó como el ganador del duelo, tras lanzar siete estupendos rollos, en los que toleró cuatro hits, una carrera, regaló dos boletos y ponchó a nueve rivales. Salvó el panameño Mariano Rivera (1).
Perdió el dominicano Pedro Martínez (0-1), con labor de seis capítulos en los que fue atacado con seis imparables, tres carreras, producto de dos jonrones, obsequió dos pasaportes y recetó ocho chocolates.
Con este triunfo, Yankees de Nueva York empató en 1-1 la Serie Mundial 2009, luego que anoche perdió por pizarra de paliza de 6-1 ante el campeón del 2008.
Los Bombarderos del Bronx amarraron el triunfo en la fatídica séptima tanda, luego que el boricua Jorge Posada pegó un sencillo con el que se llevó por delante a Brett Gardner para poner el 3-1 final y darle así a Nueva York el empate en 1-1 en esta Serie Mundial 2009.
El segundo juego de la serie mundial disputado en el Yankee Stadium finalizó con victoria de los locales por 3-1. Pedro Martínez y AJ Burnett tuvieron un duelo de picheó impresionante, permitiendo tan solo 3 carreras entre los dos.
El segundo juego de la serie mundial disputado en el Yankee Stadium finalizó con victoria de los locales por 3-1. Pedro Martínez y AJ Burnett tuvieron un duelo de picheó impresionante, permitiendo tan solo 3 carreras entre los dos.
Las carreras que permitió Marínez fueron home-runs solitarios de Teixeira y Matsui. Finalmente en la séptima un sencillo remolcador de Posada permitió la tercera carrera neoyorkina.
Cuando dejó el montículo, golpeado por los Yankees otra vez en la postemporada, la caminata de Pedro Martínez disminuyó la velocidad hasta cerca de la paralización cuando se acercó al dogout de los Filis y echó una mirada larga en el Yanqui Stadium, donde miles se estaban burlando de él, disfrutando de su fracaso, muchos de ellos coreando, como ellos lo ha hecho tan a menudo, “¿quién es su papá?”
Esta Serie Mundial esta ahora empatada a un juego cada uno, cuando los yanquis pasaron a ganar 3-1, probablemente será un camino largo, intrincado y quizás hasta estupendo ahora. Pero pocos capítulos en el libro del béisbol de este otoño probablemente serán más rico en drama que el probable partido de revancha de Martínez y sus demonios de Yankee Stadium - no sentado en los stands, sino allá arriba ya casi seguramente en su propia mente.
Martínez no puede dejar el caldero de Nueva York en paz. Cuanto más sus compañeros de equipo de los Filis ven su actuación en esta Serie Mundial, más tensión se puede crear. Sin embargo, después de sus siete entradas sin permitir carreras contra Los Ángeles en la Serie de Campeonato de la Liga Nacional y su inicio de calidad contra los Yanquis, es la mejor elección de los Filis si hay un juego 6. Además, Pedro no estará enfermo de muerte entonces.
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