“¿Frío? ¿Cuál frío? Esto es celebración”, Más pudo el calor humano que las bajas temperaturas. No era para menos, pues nueve largos años tuvieron que pasar para que se repita la historia: tener a los Yankees celebrando otro título, el número 27 de su laureada historia. Rodeados por una gran multitud que aclamaban a sus héroes, las campanas de las iglesias repicaron y una lluvia de confetti cayó sobre Broadway en el festejo de los Yankees de su 27mo título de la Serie Mundial con un desfile por el llamado "Cañón de los Héroes". Si el pasado miércoles el nuevo Yankee Stadium vivió su primera gran celebración de un título de la Serie Mundial con los Yanquis de Nueva York, el viernes, los vigésimo séptimos campeones de la Serie Mundial se dieron un baño de gloria por las calles de la Gran Manzana.
Los jugadores, junto con algunas celebridades y ex integrantes de los Yankees, disfrutaron al máximo su recorrido por el distrito financiero de Manhattan en plataformas y autobuses descapotados.
Miles de personas abarrotaron las aceras en la ruta de tres cuartos de milla cerca de Wall Street.
Familias enteras faltaron al trabajo o a la escuela para acudir. Los jugadores grabaron la celebración con sus cámaras mientras avanzaban hasta el ayuntamiento, donde el alcalde Michael Bloomberg le entregó al equipo las llaves de la ciudad.
Familias enteras faltaron al trabajo o a la escuela para acudir. Los jugadores grabaron la celebración con sus cámaras mientras avanzaban hasta el ayuntamiento, donde el alcalde Michael Bloomberg le entregó al equipo las llaves de la ciudad.
El torpedero y capitán Derek Jeter llevaba el trofeo y lo levantó alto mientras la gente gritaba y la canción "We are de Champions" (Somos los campeones) Un vez más el recorrido del Cañon de los Héroes se vistió de gala para que los neoyorquinos vitoreasen a los nuevos campeones de la Serie Mundial, con cuatro peloteros veteranos, que regresaban por quinta ocasión en su carrera a la gran fiesta popular en su honor.
Las bajas temperaturas con las que amaneció Nueva York no fueron impedimento para que la multitud aclamase y las campanas de las iglesias repicaron en Manhattan en honor de los gloriosos Yanquis que habían agrandado aun más su leyenda plagada de éxitos y títulos, nada menos que 27 de la Serie Mundial. Más de dos millones de personas se dieron cita en las calles para ver pasar a sus héroes deportivos a los que recibieron con vítores y pancartas en las que se podían leer frases como "Vamos Yankees", "Sois los Mejores", con la canción de "New York, New York".
Grandes y pequeños, aplaudían y aclamaban a los peloteros, quienes respondían al cariño de la gente, a medida que avanzaba el convoy de carrozas, bajo una lluvia de papel picado que los eufóricos aficionados lanzaban desde las ventanas de los edificios ubicados a lo largo de la avenida Broadway, desde Battery Park hasta City Hall.
Cientos de miles de fanáticos de los Yankees de Nueva York paralizaron el distrito financiero en Manhattan, adonde acudieron para rendir homenaje al equipo, que se coronó campeón. El nuevo título de los Yanquis, el vigésimo séptimo de su historia, ha sido recibido con más entusiasmo que nunca ya que se dio después de una sequía de ocho años y un inversión de 1.700 millones de dólares que tuvieron que pagar en salarios a sus jugadores. Había muchas razones para celebrarlo en grande no creen?
Seguidores de los Yankees de todas edades y etnias provenientes de los cinco condados de la ciudad y otros estados, no acudieron a trabajar o a la escuela, desafiaron el frío y desde temprano en la mañana se colocaron a lo largo del Paseo de los Héroes.
Uno a uno los Bombarderos de El Bronx fueron subiendo a la tarima que se instaló en el patio del Ayuntamiento para la ceremonia, a la que Derek Jeter, capitán del equipo, llegó con el trofeo en sus manos y tras mostrarlo a un delirante público, lo colocó en un lugar que se designó para ello. Además agradeció a los fanáticos en nombre de sus compañeros por todo el apoyo recibido.
La presencia de los jugadores puso fin a las horas de espera de los fanáticos que tuvieron la suerte de estar entre los ganadores de los 500 boletos que la Alcaldía regaló para el evento, que contó además con la presencia de los ex alcaldes David Dinkins, Edward Koch y Rudolph Giuliani. También con las ex estrellas Yankees Yogi Berra y Reggie Jackson. Los Yankees nunca se rindieron y nunca se rendirán.
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