"Trampa", "Vergüenza", "Escándalo": En el día después de la escandalosa clasificación de Francia a manos de Irlanda, por la mano con que Thierry Henry bajó la pelota en la previa del empate de los galos para obtener el boleto a Sudáfrica 2010, se desató una guerra fría que tuvo distintos frentes. Por un lado, el pedido de repetición del encuentro por parte de la Federación Irlandesa de Fútbol, que incluso contó con el apoyo gubernamental de ese país europeo.
Trampa”, “vergüenza”, “escándalo”: la prensa europea no escatimó adjetivos para calificar la mano del francés Thierry Henry, que ayudó a Francia a clasificarse al Mundial 2010 al eliminar a Irlanda en un partido de repesca.“Una vergüenza” titula en Lisboa el Diario de Noticias, mientras que Record denuncia “un gol escandaloso que clasifica a la selección gala”. “Francia, toda una campeona del mundo, llegará al Mundial con una camiseta sucia por culpa de un gol tramposo”, criticaba el periódico español El Mundo.En España, el diario AS se preguntaba sobre el error de arbitraje del sueco Martin Hansson y veía detrás “la mano de Platini”, el presidente de la UEFA.
En Suecia lo llaman "el error del siglo" "el peor árbitro desde hace 20 años" por no ver la mano de Thierry Henry que igualó el marcador y clasificó a Francia para el Mundial.
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