Triste final

El tema mas caliente es sin duda la gran tragedia que ha sucedido la muerte el suicido o como prefieran llamarlo a final simplemente muerte, del boxeador venezolano y campeón ligero del Consejo Mundial de Boxeo (CMB), Edwin "Inca" Valero, fue encontrado muerto a la 1:30 (hora local) de la madrugada de este lunes en una celda de la policía de Carabobo, donde se encontraba detenido desde ayer por el presunto delito de asesinato en contra de su esposa Jennifer Carolina Viera de Valero.

Oficialmente, la causa de la muerte del boxeador venezolano fue "asfixia mecánica por ahorcamiento, "Acabo de matar a mi esposa". Así el boxeador Edwin "Inca" Valero se declaró culpable ante los empleados que el domingo a las 5:30 de la mañana estaban en el lobby del hotel Tacarigua Intercontinental de Valencia. El cuerpo de la muchacha presentaba heridas de arma blanca y supuestamente Valero habría cometido el crimen bajo efectos del acohol. Los patólogos que examinaron el cadáver de la joven consideran que Valero utilizó un bisturí para asesinarla.

Ahora resulta que nadie veía venir que Edwin Valero, un tipo con antecedentes de violencia e inestabilidad mental que ayer asesinó a su esposa, podía intentar suicidarse en su celda… Es más fácil un suicidio y un funeral que explicar como a este tipo se le permitió seguir arriba de un ring con todos sus antecedentes criminales.

Es increíble que las autoridades venezolanas dejen a un homicida inestable y dañado del cerebro sin supervisión en su celda y además con artículos de ropa (¿Un cinturón? ¿Una bufanda? ¿Una camiseta? ¿Qué fue?) que fácilmente pudieron ser utilizadas para cometer suicidio parece, más que un descuido negligente. Que manera más sencilla de deshacerse del boxeador simpatizante de Chávez y que tenía tatuado el rostro del mandatario venezolano en el pecho. Sin enfrentar juicios escandalosos y largos, sin circo mediático, simplemente la muerte y ya, rápida limpia y definitiva.

Lo de Valero no fue un final trágico porque ya se sabia que así iba a terminar total Valero es el único responsable de esto que pasó, por su conducta. La verdadera tragedia fue la sufrida por su esposa Jennifer, muerta a los 24 años de edad a manos de este sicópata. Valero tampoco fue una leyenda del boxeo como pretenden algunos estultos. Fue simplemente un asesino que a veces hizo de boxeador y otras de activista de Hugo Chávez. Ni más ni menos.

Valero llegó a un triste final, Boxeador tenaz y de un carácter explosivo, dentro y fuera del ring, Edwin "Inca" Valero fue una víctima más de la adicción al alcohol y las drogas, el merideño puso fin así a varios meses de controversia en torno a su círculo familiar, luego de recibir acusaciones de maltrato físico a su esposa, madre y hermana.