Sudáfrica es la esperanza de poder lógralo esta vez.

De la histeria de McClaren al minucioso control de Capello. Inglaterra vuelve a ser favorita. La reacción a la humillación que supuso quedar fuera de la Eurocopa 2008 en el mismísimo Wembley no se hizo esperar. Por segunda vez en la historia, un entrenador no británico dirigirá a la selección inglesa en un Mundial. El metódico estratega italiano ha de superar el listón marcado por el sueco Sven Goran Eriksson en Alemania 2006: los cuartos de final. Siempre cuando llega un nuevo mundial es inevitable hacernos la pregunta del millón, si este será el año de Inglaterra y volverá nuevamente a levantar la copa del mundo luego de haber conquistado el cetro en el año 1966, cuando fueron sede y terminaron ganando el campeonato tras un polémico gol que aún se discute su traspasó la línea o no.

Ahora, con Fabio Capello al frente, la selección inglesa está cargada de mucho optimismo y con un Wayne Rooney en excelente forma física la ilusión de los británicos se acrecienta aún más. Sin embargo, un hecho que podría truncar las aspiraciones de los ingleses es la ausencia de algunas de sus principales figuras por lesión, entre las que destacan, David Beckham y Rio Ferdinand. El grupo les pinta fácil para clasificar, pero sus verdaderas pruebas se presentarán en etapas posteriores.

"Es importante empezar con autoridad. En nuestro país, todos están apoyándonos. La preparación ha sido buena, a pesar de no firmar grandes partidos. Hay otros grandes equipos, pero cuando veo al nuestro, me siento con confianza: estamos ante una buena oportunidad", comentó. Gerrard nuevo capitan de los leones.

Estoy triste por Rio, pero ahora tengo la gran responsabilidad de liderar al equipo. No voy a cambiar. Si he conseguido este puesto es porque el seleccionador cree que puedo ser un buen capitán, creo que cuento con el respeto de los jugadores", dijo.

Wayne tiene suficiente experiencia. Sabe que le necesitamos en el campo. No se le puede quitar el entusiasmo, él siempre se involucra a fondo y eso es lo que le convierte en uno de los mejores del mundo", apuntó el capitán. A pesar de ello, pidió a sus compañeros que sean prudentes y que recuerden que el técnico Fabio Capello ha dicho que es importante acabar los partidos con once jugadores, para no repetir fracasos del pasado que fueron motivados en parte por expulsiones absurdas.