El béisbol venezolano mostró en cualquier terreno que posee calidad. El equipo criollo, sin contar con sus mejores hombres, tiene una foja lograda con la intensidad que caracteriza al pueblo venezolano. Estoy convencida de que el equipo del 2009 era superior al del Clásico del 2006. En esta oportunidad el combinado nacional llego con menos estrellas pero con más hombres dispuestos a hacer el trabajo, había menos aires de superioridad y de estrellas. A pesar de los pesares, el Clásico Mundial de Béisbol ha continuado regando éxitos.
Antes de empezar a hablar sobre el balance del equipo venezolano es bueno hacer un poco de mención en un acontecimiento que sucedió en la selección venezolana y no es más que la persecución que vivió uno de los jugadores del tricolor para ser mas concreto Magglio Ordóñez los abucheos de los fanáticos hacia Magglio Ordóñez. No lo pitaron porque su bateo en el Clásico Mundial fue pirrico Lo hostigaron por ser chavista y haber expresado públicamente su parcialidad política. Pero ahora este tipo de situaciones cuando personas con imagen publica y que trabajan para un publico y son imagen a seguir se mezclan con la política. Los fanáticos no pararon de gritar ¡Chavista, chavista! en rechazo a la posición política de Ordóñez. Algunos hinchas incluso desearon que lo expulsaran de las Grandes Ligas, es posible incluso que muchos desearan el triunfo criollo pero el fracaso de Magglio, aunque ligando eso traiga consigo el riesgo de la derrota.
Los aficionados que pagan un boleto y tienen el derecho de gritar lo que quieran, incluyendo contra sus propios jugadores y su país. Definitivamente, es nocivo mezclar política con deporte, en Venezuela con el deporte hay que jugar center field. La práctica deportiva y el seguimiento a las selecciones nacionales y equipos profesionales, no debe estar contaminada por la polarización que enferma a la sociedad venezolana. Por el contrario, pudiera ser uno de los canales idóneos para transitar hacia la reconciliación.
Muchos de nuestros jóvenes peloteros demostraron que Venezuela cuenta con un gran relevo de futuro en béisbol, lastima que no fue suficiente para obtener el titulo.
Antes de empezar a hablar sobre el balance del equipo venezolano es bueno hacer un poco de mención en un acontecimiento que sucedió en la selección venezolana y no es más que la persecución que vivió uno de los jugadores del tricolor para ser mas concreto Magglio Ordóñez los abucheos de los fanáticos hacia Magglio Ordóñez. No lo pitaron porque su bateo en el Clásico Mundial fue pirrico Lo hostigaron por ser chavista y haber expresado públicamente su parcialidad política. Pero ahora este tipo de situaciones cuando personas con imagen publica y que trabajan para un publico y son imagen a seguir se mezclan con la política. Los fanáticos no pararon de gritar ¡Chavista, chavista! en rechazo a la posición política de Ordóñez. Algunos hinchas incluso desearon que lo expulsaran de las Grandes Ligas, es posible incluso que muchos desearan el triunfo criollo pero el fracaso de Magglio, aunque ligando eso traiga consigo el riesgo de la derrota.
Los aficionados que pagan un boleto y tienen el derecho de gritar lo que quieran, incluyendo contra sus propios jugadores y su país. Definitivamente, es nocivo mezclar política con deporte, en Venezuela con el deporte hay que jugar center field. La práctica deportiva y el seguimiento a las selecciones nacionales y equipos profesionales, no debe estar contaminada por la polarización que enferma a la sociedad venezolana. Por el contrario, pudiera ser uno de los canales idóneos para transitar hacia la reconciliación.
Muchos de nuestros jóvenes peloteros demostraron que Venezuela cuenta con un gran relevo de futuro en béisbol, lastima que no fue suficiente para obtener el titulo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario